PUBLICADO EN EL DIARIO DE JEREZ (Cartas al Director 21/09/09)
Me enteré por la prensa, de un ciclo de conferencias que me pareció de interés, “Diálogos con la ciencia 2009”, la primera de ellas, ese mismo día 8 a las 20:00 h, impartida por D. Francisco Ayala, Biólogo, miembro de la Academia de las Ciencias de EE.UU y Doctor Honoris causa por más de 15 Universidades, es decir todo un lujo, el titulo “Darwin y el diseño inteligente”, se pueden imaginar que pinta más extraordinaria y en especial para un servidor, al que tanto le influyo el Sr. Darwin en su adolescencia. Pues bien, avisé a mi buen amigo Ángel, apasionado de la cultura y en tiempo record y tras varias gestiones pudo colocar a los zagales, partimos de Jerez y llegamos a Cádiz con tiempo suficiente, hubo suerte y pudimos aparcar, a las 7:45 estábamos en la puerta del Palacio Provincial de la Diputación, había unas 50 personas y la puerta cerrada, nos preguntamos, ¿Qué raro que no hayan abierto aún?, ilusos, preguntamos y el aforo es de 120 personas, se completo hace rato y allí nos hayamos 50 personas llegadas de distintas poblaciones, con la cara partida.
Y yo me pregunto, ¿No se esperaba tanto interés?, ¿Tan poca confianza se tiene en esta sociedad, cada vez más de “pan y circo”? y si esto no se cuestionó, ¿no hay en la ciudad edificios con mayor aforo?, la respuesta es obvia, entonces ¿Cuál es el problema?
Espero que confíen, en que aún sobrevivimos bastantes personas interesadas por ampliar nuestra cultura y fomentarla, y no volvamos a quedar sin escuchar las interesantes conferencias, que nuestra Diputación organiza con acierto en los contenidos.
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viernes, 5 de marzo de 2010
jueves, 4 de marzo de 2010
MAS PALMERAS
PUBLICADO EN EL DIARIO DE JEREZ (Cartas al Director 16/02/07)
Lo que empezó siendo una preocupación de ciertos colectivos y ciudadanos, se ha convertido en una realidad, ya no esta en proyecto, se esta ejecutando, no me lo creía cuando lo leí en la prensa, tenia que verlo con mis propios ojos y es verdad, el fotógrafo no se había equivocado, era la avenida de la Cruz Roja donde están colocando las más que temidas, ya odiadas palmeras. Lo comente anteriormente quedan “fantásticas” en el Palmeral de Elche o en cualquiera de los grandes desiertos del planeta, los beduinos y los tuareg lo iban a agradecer, pero en el nombre de cualquiera de los dioses de este multicultural país, no se carguen una de las avenidas más bonitas y sombreadas que hay en este gran Jerez. Ya es pecado restarnos de la belleza y frondosidad de las grandes jacarandas, lagunaria, plátano de sombra, agracejo, pino o la mismísima tipuana de las nuevas plazas y avenidas, pero es pecado mortal quitar (como me temo) hermosos árboles sin justificación alguna, para poner las susodichas palmeras, si no ¿que sentido tiene plantarlas entre los pinos actuales sin hueco ni armonía? Y viene la pregunta del millón ¿Por qué?, cual es ese oscuro objeto de deseo que mueve este afán palmerir, ¿no hay nadie, ni nada con poder suficiente para parar este despropósito?, y una más ¿nos están preparando para el cambio climático?
Espero que esta carta contribuya como la anterior de la plaza del Arenal (aunque tarde), a poner la tirita antes que el “corte”.
Lo que empezó siendo una preocupación de ciertos colectivos y ciudadanos, se ha convertido en una realidad, ya no esta en proyecto, se esta ejecutando, no me lo creía cuando lo leí en la prensa, tenia que verlo con mis propios ojos y es verdad, el fotógrafo no se había equivocado, era la avenida de la Cruz Roja donde están colocando las más que temidas, ya odiadas palmeras. Lo comente anteriormente quedan “fantásticas” en el Palmeral de Elche o en cualquiera de los grandes desiertos del planeta, los beduinos y los tuareg lo iban a agradecer, pero en el nombre de cualquiera de los dioses de este multicultural país, no se carguen una de las avenidas más bonitas y sombreadas que hay en este gran Jerez. Ya es pecado restarnos de la belleza y frondosidad de las grandes jacarandas, lagunaria, plátano de sombra, agracejo, pino o la mismísima tipuana de las nuevas plazas y avenidas, pero es pecado mortal quitar (como me temo) hermosos árboles sin justificación alguna, para poner las susodichas palmeras, si no ¿que sentido tiene plantarlas entre los pinos actuales sin hueco ni armonía? Y viene la pregunta del millón ¿Por qué?, cual es ese oscuro objeto de deseo que mueve este afán palmerir, ¿no hay nadie, ni nada con poder suficiente para parar este despropósito?, y una más ¿nos están preparando para el cambio climático?
Espero que esta carta contribuya como la anterior de la plaza del Arenal (aunque tarde), a poner la tirita antes que el “corte”.
miércoles, 3 de marzo de 2010
S.O.S. TABANCO HUNDIDO
PUBLICADO EN EL DIARIO D JEREZ (Cartas al Director 26/08/06)
La verdad es que tenía muchos encabezados para esta carta, como pueden ser “SALVEMOS LOS TABANCOS”, “LOS ULTIMOS DE FILIPINAS”, “LA ESENCIA DEL JEREZ AGONIZA” en fin, hay más pero bueno ponga ustedes el suyo.
Irremediablente ya no tiene solución, “El nono” ya NO EXISTE. La ley del ladrillo una vez mas sé ha impuesto, no entiende de patrimonio cultural del vino, paradójicamente en la misma capital del vino, solo de pasta y no precisamente pastas gallo. ¡Que pena! recuerdo que desde pequeño disfrutaba con el aroma de ese mundo desconocido de los mayores, que eran nuestros queridos TABANCOS, con esos personajes tan Jerezanos, por este camino, ni los Jerezanos del futuro inmediato van a saberlo, los pocos que quedan mantiene la verdadera unión del pueblo con las bodegas, esos “despachos de vinos” que muchos de nosotros en nuestra adolescencia y juventud pisábamos por primera vez como clientes, para degustar nuestros vinos, recuerdan los desaparecidos “La pandilla”, “El guitarron”, “Los palitos” y otros que no recuerdo los nombres en la plaza Rivero, plaza San Juan, etc etc... En definitiva pienso que es un patrimonio de todos y deberían de tomar cartas en el asunto nuestros dirigentes, para que no se cierren o derriben ni uno más, se le conceda la catalogación apropiada y en todo caso se rehabiliten, que hoy en día se puede rehabilitar todo lo que se quiera con los avances técnicos que existen. Por favor, es una de las señas de identidad de nuestra ciudad, lo que muchos “guiris” vienen buscando, “la esencia” del JEREZ en la calle, lo antiguo, lo histórico, LO AUTENTICO.
La verdad es que tenía muchos encabezados para esta carta, como pueden ser “SALVEMOS LOS TABANCOS”, “LOS ULTIMOS DE FILIPINAS”, “LA ESENCIA DEL JEREZ AGONIZA” en fin, hay más pero bueno ponga ustedes el suyo.
Irremediablente ya no tiene solución, “El nono” ya NO EXISTE. La ley del ladrillo una vez mas sé ha impuesto, no entiende de patrimonio cultural del vino, paradójicamente en la misma capital del vino, solo de pasta y no precisamente pastas gallo. ¡Que pena! recuerdo que desde pequeño disfrutaba con el aroma de ese mundo desconocido de los mayores, que eran nuestros queridos TABANCOS, con esos personajes tan Jerezanos, por este camino, ni los Jerezanos del futuro inmediato van a saberlo, los pocos que quedan mantiene la verdadera unión del pueblo con las bodegas, esos “despachos de vinos” que muchos de nosotros en nuestra adolescencia y juventud pisábamos por primera vez como clientes, para degustar nuestros vinos, recuerdan los desaparecidos “La pandilla”, “El guitarron”, “Los palitos” y otros que no recuerdo los nombres en la plaza Rivero, plaza San Juan, etc etc... En definitiva pienso que es un patrimonio de todos y deberían de tomar cartas en el asunto nuestros dirigentes, para que no se cierren o derriben ni uno más, se le conceda la catalogación apropiada y en todo caso se rehabiliten, que hoy en día se puede rehabilitar todo lo que se quiera con los avances técnicos que existen. Por favor, es una de las señas de identidad de nuestra ciudad, lo que muchos “guiris” vienen buscando, “la esencia” del JEREZ en la calle, lo antiguo, lo histórico, LO AUTENTICO.
martes, 2 de marzo de 2010
EL ARENAL, PROPIAMENTE DICHO
PUBLICADO EN EL DIARIO DE JEREZ (Cartas al Director 8/07/06)
El Arenal viene del latín Arenarium “lugar de combate”, el que sostuvieron unos caballeros durante 3 días en el año de 1343.
Al parecer los políticos y técnicos que deciden el diseño de nuestras plazas, no se terminan de dar cuenta de en que zona del continente, país (o como se diga ahora) y región vivimos, unas simples notas, latitud 36-45N y longitud 006-04W, según el Instituto Nacional de Meteorología, la temperatura media es de 17,7º y las máximas medias son de 31,3º, alcanzando los 40º y 137 días al año totalmente despejados, por lo que Jerez registra unas temperaturas altas o muy altas en el periodo estival.
Es decir que por lógica y por el menos común de los sentidos, necesitamos salvaguardarnos de los nada piadosos rayos de sol, que hacen de Jerez en verano un verdadero “lugar de combate” y que mejor para combatir esos rayos que inundar nuestras plazas y calles de PALMERAS, que por cierto, quedan muy bien en películas como Lawrence de Arabia o Kartum y no me entiendan mal, no tengo nada en contra de las palmeras, pero creo que como bien emplearon nuestros antepasados de Al-Andalus, la solución es crear vergeles y oasis dentro de las ciudades, para confort y regocijo de los ciudadanos, por que no todos podemos tener un chalet con buenos árboles que nos den sombra, “o será por eso”, que como no lo padecen no lo sienten, que de la oficina al chalet del extrarradio o de la costa y los pocos que sobrevivimos en el centro, nos tenemos que aviar con un sombrerito de paja y una cantimplora para cruzar nuestra plaza del Arenal.
El Arenal viene del latín Arenarium “lugar de combate”, el que sostuvieron unos caballeros durante 3 días en el año de 1343.
Al parecer los políticos y técnicos que deciden el diseño de nuestras plazas, no se terminan de dar cuenta de en que zona del continente, país (o como se diga ahora) y región vivimos, unas simples notas, latitud 36-45N y longitud 006-04W, según el Instituto Nacional de Meteorología, la temperatura media es de 17,7º y las máximas medias son de 31,3º, alcanzando los 40º y 137 días al año totalmente despejados, por lo que Jerez registra unas temperaturas altas o muy altas en el periodo estival.
Es decir que por lógica y por el menos común de los sentidos, necesitamos salvaguardarnos de los nada piadosos rayos de sol, que hacen de Jerez en verano un verdadero “lugar de combate” y que mejor para combatir esos rayos que inundar nuestras plazas y calles de PALMERAS, que por cierto, quedan muy bien en películas como Lawrence de Arabia o Kartum y no me entiendan mal, no tengo nada en contra de las palmeras, pero creo que como bien emplearon nuestros antepasados de Al-Andalus, la solución es crear vergeles y oasis dentro de las ciudades, para confort y regocijo de los ciudadanos, por que no todos podemos tener un chalet con buenos árboles que nos den sombra, “o será por eso”, que como no lo padecen no lo sienten, que de la oficina al chalet del extrarradio o de la costa y los pocos que sobrevivimos en el centro, nos tenemos que aviar con un sombrerito de paja y una cantimplora para cruzar nuestra plaza del Arenal.
lunes, 1 de marzo de 2010
BUSCAMOS UN CAFE
PUBLICADO EN EL DIARIO DE JEREZ (Cartas al Director 8/10/05)
Todos sabemos que Jerez esta en el sur de Andalucía, sur de España y sur de Europa, que nuestro clima es más bien cálido y hacemos mucha vida en la calle, somos así y no vamos a cambiar, pero seguro que alguna vez, después de un buen almuerzo en el centro de nuestra ciudad - dicho sea de paso más bien de tapas, porque lo de almuerzo en restaurante es otro cantar- nos apetece ir a tomar un cafelito, con un pastelito y si es posible de las monjas, para a continuación mantener una tertulia, una partida de cartas, leer la prensa o simplemente disfrutar viendo el ir y venir de la gente por la ciudad.
Y no digamos si lo que pretendemos es fomentar la cultura, en los llamados café-teatro o lugar de encuentro de futuros literatos y pensadores. Porque quiero pensar que Jerez puede ofrecernos a nosotros mismos y a los que nos visitan, algo más que caballos, flamenco, semana santa y navidad, que no tengo nada en contra, pero somos algo más, al menos eso quiero pensar.
A renglón seguido y en el ámbito turístico, no sé si es culpa de la administración, empresarios o ciudadanos en general, me da igual, vivo en el centro desde que nací y veo tristemente a los “guiris” deambulando por la ciudad, precisamente en la hora critica de las 4 a las 7 de la tarde - LA DEL CAFÉ - sin saber en dónde posarse ni a donde ir. Por hacer alguna referencia al panorama actual y por citar algunos, hay un establecimiento que cubre el expediente aunque muy limitado por su capacidad y ambiente, pero al menos da café y buenos pasteles, allí están todos claro, aunque solo quepan unos 12 o poco más, hay otro que se ha quedado en los 70 y no ofrece nada mas y otro nuevo bien decorado, pero que se queda solo en el titulo y más bien se trata de un local de copas y del servicio ni hablar pues pocos se salvan.
Tantos nuevos hoteles y tanta promoción y luego ¿QUÉ?, ni un maldito CAFÉ en su amplio significado, no un bar que té de un cortao. Hay que dar calidad, confort y ambiente, que no se vuelvan a su tierra como aquel viajero que dijo:
“Jerez de la frontera es una ciudad de treinta mil almas y al recorrer sus calles a mitad del día, podríamos creer que esta apenas habitada....Hay que ver esta ciudad pero hay que cuidarse de no quedarse allí mas de un día; es de una tristeza mortal o de una tristeza tonta que os conduce al aburrimiento”.
(Promenades en Espagne pendant les annees 1849 y 1850 de Josephine de Brinckmann)
Existen muchas y buenas casas para acondicionar, recordemos el magnifico café Arenal, en el centro histórico o preciosos espacios por la zona de la Alameda Vieja, donde poner un clásico kiosco de principios del siglo XX, con su velador con vistas a la catedral y al Alcázar o las bonitas azoteas del Arroyo donde ya por fin hay hoteles. No entiendo cómo no se aprovechan esos recursos. No pretendo el Café Gijón o el café A brasileira, pero bueno, algo parecido. He estado en bastantes ciudades y lógicamente visitamos EL CENTRO HISTORICO, claro,- no te vas a ir a un barrio a buscar un café- y siempre lo he encontrado, un lugar donde descansar y disfrutar del ambiente de los susodichos CAFES, y no uno ni dos, sino varios, bien cuidados, bien atendidos y manteniendo el encanto, inclusive en pequeñas poblaciones y siempre he comentado “¡como en mi ciudad de 200.000 habitantes, no hay tan siquiera uno!”.
Tan solo quiero revindicar mi añoranza por esos establecimientos de finales del XIX y principios del siglo XX, ese maravilloso ambiente que hemos leído y visto en innumerables películas, lugar de reunión de amigos, cita de enamorados, salón de lectura, tertulias espontáneas o programadas, reunión familiar, negocios o simplemente un lugar donde SABOREAR UN BUEN CAFÉ.
Todos sabemos que Jerez esta en el sur de Andalucía, sur de España y sur de Europa, que nuestro clima es más bien cálido y hacemos mucha vida en la calle, somos así y no vamos a cambiar, pero seguro que alguna vez, después de un buen almuerzo en el centro de nuestra ciudad - dicho sea de paso más bien de tapas, porque lo de almuerzo en restaurante es otro cantar- nos apetece ir a tomar un cafelito, con un pastelito y si es posible de las monjas, para a continuación mantener una tertulia, una partida de cartas, leer la prensa o simplemente disfrutar viendo el ir y venir de la gente por la ciudad.
Y no digamos si lo que pretendemos es fomentar la cultura, en los llamados café-teatro o lugar de encuentro de futuros literatos y pensadores. Porque quiero pensar que Jerez puede ofrecernos a nosotros mismos y a los que nos visitan, algo más que caballos, flamenco, semana santa y navidad, que no tengo nada en contra, pero somos algo más, al menos eso quiero pensar.
A renglón seguido y en el ámbito turístico, no sé si es culpa de la administración, empresarios o ciudadanos en general, me da igual, vivo en el centro desde que nací y veo tristemente a los “guiris” deambulando por la ciudad, precisamente en la hora critica de las 4 a las 7 de la tarde - LA DEL CAFÉ - sin saber en dónde posarse ni a donde ir. Por hacer alguna referencia al panorama actual y por citar algunos, hay un establecimiento que cubre el expediente aunque muy limitado por su capacidad y ambiente, pero al menos da café y buenos pasteles, allí están todos claro, aunque solo quepan unos 12 o poco más, hay otro que se ha quedado en los 70 y no ofrece nada mas y otro nuevo bien decorado, pero que se queda solo en el titulo y más bien se trata de un local de copas y del servicio ni hablar pues pocos se salvan.
Tantos nuevos hoteles y tanta promoción y luego ¿QUÉ?, ni un maldito CAFÉ en su amplio significado, no un bar que té de un cortao. Hay que dar calidad, confort y ambiente, que no se vuelvan a su tierra como aquel viajero que dijo:
“Jerez de la frontera es una ciudad de treinta mil almas y al recorrer sus calles a mitad del día, podríamos creer que esta apenas habitada....Hay que ver esta ciudad pero hay que cuidarse de no quedarse allí mas de un día; es de una tristeza mortal o de una tristeza tonta que os conduce al aburrimiento”.
(Promenades en Espagne pendant les annees 1849 y 1850 de Josephine de Brinckmann)
Existen muchas y buenas casas para acondicionar, recordemos el magnifico café Arenal, en el centro histórico o preciosos espacios por la zona de la Alameda Vieja, donde poner un clásico kiosco de principios del siglo XX, con su velador con vistas a la catedral y al Alcázar o las bonitas azoteas del Arroyo donde ya por fin hay hoteles. No entiendo cómo no se aprovechan esos recursos. No pretendo el Café Gijón o el café A brasileira, pero bueno, algo parecido. He estado en bastantes ciudades y lógicamente visitamos EL CENTRO HISTORICO, claro,- no te vas a ir a un barrio a buscar un café- y siempre lo he encontrado, un lugar donde descansar y disfrutar del ambiente de los susodichos CAFES, y no uno ni dos, sino varios, bien cuidados, bien atendidos y manteniendo el encanto, inclusive en pequeñas poblaciones y siempre he comentado “¡como en mi ciudad de 200.000 habitantes, no hay tan siquiera uno!”.
Tan solo quiero revindicar mi añoranza por esos establecimientos de finales del XIX y principios del siglo XX, ese maravilloso ambiente que hemos leído y visto en innumerables películas, lugar de reunión de amigos, cita de enamorados, salón de lectura, tertulias espontáneas o programadas, reunión familiar, negocios o simplemente un lugar donde SABOREAR UN BUEN CAFÉ.
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